top of page

El hall de entrada es lo primero que nuestros ojos ven cuando entramos a una casa. Es la primera impresión y si logramos puede ser una de las más duraderas en la memoria. En la mayoría de los casos tenemos un escenario complejo, ya que contamos con habitualmente un muro disponible o máximo dos y, mínima perspectiva. En ese muro, también es habitual, solemos encontrar un mueble de arrimo y colgando sobre él un espejo o un cuadro. Y sobre aquel mueble algunas figuritas de adorno.

IMG_2166.JPG

Ese mismo espacio suele ocuparse para depositar correspondencia y cuentas. Y mi concepto es quitarle a aquel espacio toda funcionalidad, para evitar que con el tráfico natural de la casa se acumulen objetos como abrigos, paraguas, llaves y objetos de niños como mochilas y otros. Siempre limpio con respecto de la vida cotidiana del hogar. No puede estar atiborrado. Podemos hacer ver también un espacio artístico.

IMG_2174.JPG

El hall de entrada es muy propicio para experimentar, sobre todo colores en sus muros o diversas aplicaciones, como papeles murales, texturas novedosas. En ese espacio bien puede convivir un muro rojo bermellón con un gris o verde agua, o malva, o damasco, en fin, una infinidad de posibilidades de la paleta.

¿Necesariamente debe ir un mueble de arrimo? Sí y no. Si somos creativos podemos prescindir de él. Un amigo mío tiene su bicicleta en el muro disponible como si fuese una escultura. A propósito de una escultura moderna o antigua también puede ocupar el lugar central en ese muro, sin que tenga ninguna funcionalidad.

IMG_2037_A.jpg

En mi caso, temporalmente, encontramos en mi hall de entrada muros beige claro y que combinan al fondo con un cuadro contemporáneo. El cuadro, como todos los objetos de la casa, debe obedecer también a un impulso artístico, a una elección hecha con el corazón y nuestro sentido del arte. En otras palabras, cuando vi el cuadro de esta joven promesa lo amé y lo compré.

En un muro perpendicular, también ciego, realicé una instalación a partir de piedras de lecho de río dispuestas en forma circular, lo que hace las veces de una escultura de muro.

El único mueble que encontramos en este hall es un sillón Luis XV, tapizado en negro con beige de diseño moderno. Hay en este una unidad cromática dada por el beige, el cuadro que acaba mandando todo el torno. El resultado es un espacio despejado, alegre, luminoso, artístico, con un dejo joven y a la vez armónico para producir una sensación de tranquilidad y paz.

IMG_1997_A.JPG

HALL DE ENTRADA

bottom of page